“Hay lugares donde encontrarse y otros en los que perderse; paisajes que evocan el exotismo de lo diferente y otros, la vida en estado puro. Pero encontrarlo todo en un mismo enclave, significa dar con ese sitio que todos buscamos, en el que nuestro espíritu descansa y el tiempo transcurre sin prisa”.
Con esta filosofía hemos dado vida a éste, nuestro pequeño paraíso: el Riad - Hotel LA MAISON BLANCHE. Un lugar diseñado para el disfrute de los sentidos, escondido entre las maravillosas callejuelas de la antigua Kasbah de Tánger, esculpido por expertas manos artesanas locales, y donde cada rincón se ha pensado con mimo para cuidarte. Pero nuestro sueño no se hubiera hecho realidad sin la dedicación del conocido diseñador de interiores Régis Milcent, la esencia de este lugar. Su alma y elegancia están presentes en la decoración de cada una de las nueve habitaciones con las que cuenta el Riad; así como en los salones, los muebles, y los llamativos colores que le dan vida.
Durante seis años hemos trabajado en la restauración de esta antigua casa tangerina, que data del siglo XIV, y está ubicada en una de las zonas históricas más espectaculares de Tánger. Desde nuestra terraza podrás explorar la belleza de los amaneceres y atardeceres de esta fascinante ciudad, donde Europa y África confluyen en una mezcla de colorido y exotismo, mientras disfrutas de nuestros deliciosos desayunos tangerinos o de cualquier otro placer de la vida.
En el Riad - Hotel La Maison Blanche todo está pensado para que no tengas que preocuparte de nada, y te sumerjas de lleno en la verdadera esencia de un Riad árabe. El Patio de la entrada está presidido por una fuente, característica tradicional en la cultura y la arquitectura islámica, que fluye suavemente e invita a la calma, mientas una gran claraboya en lo alto ilumina todo el entorno.
Los aromas de nuestro riad te sorprenderán y embriagarán desde el primer momento. Hemos dedicado un cuidado y atención muy especial a los mismos, con la elaboración en exclusiva de nuestros propios perfumes, a partir de esencias cítricas tradicionalmente tangerinas.
Para la zona del Hall diseñamos acogedoras estancias, con elegantes y coloridos sofás, que te invitan a tomar un reponedor té menta marroquí, mientras descansas, conversas o planificas tus visitas a una apasionante ciudad por descubrir. Exclusivas telas y tapizados franceses cobran protagonismo en este lugar, fresco en verano y acogedor en invierno gracias a su relajante chimenea. También los techos se han cuidado al detalle, con evocadores frescos de motivos orientales, creados por una pintora de renombre local.
El hotel dispone de WIFI gratuito en todas sus estancias. La recepción, pensado en tu comodidad, se encuentra en la misma entrada y está abierta las 24 horas. Nuestro principal objetivo es que disfrutes de unos días únicos y especiales. Para ello estamos siempre dispuestos a ofrecerte sugerencias y consejos que te inviten a sacar el mayor provecho de tu estancia, tanto en nuestro hotel como en todas tus visitas en Tánger o a cualquiera de sus bellas localidades.
La Terraza es uno de los lugares más especiales de este pequeño paraíso. A través de los seductores amaneceres tangerinos, y entre sus coloridos juegos de luces, irás poco a poco descubriendo esta fascinante ciudad, con sus jardines de Mendoubia, la belleza de sus playas o la actividad de la Kasbah, la ciudad fortificada anexa a la Medina.
En las mañanas cálidas te invitaremos a disfrutar de nuestro completo desayuno marroquí en la azotea, mientras te conviertes en espectador de excepción del bullicioso despertar de Tánger. En nuestro festival gastronómico matutino, empezaremos con un delicioso zumo de naranja recién exprimido, acompañado de “rgayef”, una torta marroquí que se sirve tradicionalmente en las mañanas, junto a una variada selección de mermeladas de la zona (higos, limón, albaricoque…), queso de cabra o mantequilla de almendras con aceite de argán casera. Entre otras delicias, también te serviremos una cesta de panes marroquís elaborados artesanalmente, como el típicamente bereber. Para finalizar, los más golosos disfrutarán a buen seguro con nuestros creps (“bagrir”) y distintas piezas de bollería local. Tras este completo desayuno, en el que por supuesto se sirve fruta fresca de temporada, te y café, ya estarás listo para descubrir y dejarte sorprender por la ciudad.
Tras recorrer y disfrutar de la Medina, la Kasbah y los principales monumentos y, con la llegada del atardecer, llega otro de los instantes más hermosos para disfrutar de nuestra terraza. Y no sólo de la belleza del paisaje, sino también del devenir en las azoteas de Tánger. Es un momento muy especial para observar la cotidianeidad de los tangerinos que, cuando comienza a caer la noche y el tiempo lo permite, suben a las terrazas, encienden las luces y nos regalan escenas de juegos, bailes, comidas… en definitiva, vida en estado puro.
La terraza de nuestro Riad está diseñada para uso y disfrute de nuestros huéspedes por lo que dispone de sillas y mesas de madera, donde se sirven los desayunos o cualquier otro refrigerio, así como tumbonas en las que leer un buen libro o simplemente disfrutar del cálido sol de África.
Podemos organizar cenas a petición de nuestros huéspedes. Estaremos encantados de recomendarte restaurantes locales y realizar las correspondientes reservas.
Cada una de las nueve Habitaciones con las que cuenta este Riad de cuatro plantas, lleva el nombre de una persona conocida que vivió o pasó un tiempo en Tánger. Este ha sido nuestro pequeño homenaje a aquellos artistas, escritores, pintores… que hicieron de Tánger un lugar cosmopolita, influenciado por diversas culturas y fascinante por la mezcla de las mismas. Puedes elegir entre personas de la talla de Paul Bowles, Juan Goytisolo o Henri Matisse.
La decoración de cada uno de los dormitorios está cuidada al detalle: desde la puerta de entrada, todas antiguas y recuperadas por artesanos tangerinos, hasta las preciosas y coloridas telas, traídas especialmente de Francia, que adornan las paredes. También los amplios armarios, las consolas o los cabeceros están hechos a medida y a mano; mientras los sofás y las sillas cuentan con unos maravillosos tapizados en terciopelos de intensos tonos rojos o verdes. Por su parte los cuadros, los mapas y las vasijas que presiden las estancias han sido elegidos pieza a pieza, y adquiridos en anticuarios a lo largo de estos seis años.
Las camas de nuestro Riad harán volar tu imaginación y te transportarán a la tierra de las mil y una noches, donde podrás rendirte a un sueño confortable y reparador. Tanto en las habitaciones como en el baño, encontrarás flores frescas cada día, que sin duda darán un toque romántico a tu estancia.
Cada estancia dispone de baño privado, decorado según el estilo de la misma. Uno de nuestros secretos de belleza mejor guardados son los jabones y champús que te ofrecemos que, al igual que los aromas, han sido diseñados a partir de esencias naturales tangerinas y la experiencia de expertos artesanos. El jabón está hecho a base de cítricos, y el champú y el gel, de flor de azahar y jazmín. Sus dulces aromas te harán sentir el exotismo de un lugar único, mientras te sumerges en un baño de nuevas experiencias.
Te informamos que los precios de las habitaciones oscilan entre los 120 y los 170 euros por noche, desayuno incluido. No hay estancia mínima y la limpieza diaria está incluida en el precio de la misma. Todas disponen de WIFI gratuito, teléfono directo y enchufes europeos. Para más información específica sobre cada una de las habitaciones por favor haga clic en el menú principal de “Habitaciones”.